Galilea, donde todo empezó
Autor: P. Juan Molina
Del 20 al 31 de julio tuvo lugar la segunda edición del voluntariado de la JM Universitaria Nacional “Galilea”. Se trata de una experiencia intensa de encuentro con el Señor en la oración y el servicio en Florencio Varela. Ahí trabajaron en el Club Juan Pablo II, en la Parroquia San Pantaleón, en la Casa del Niño y en La Nazarena. Galilea remite al lugar donde Jesús inició su misión y llamó a sus discípulos. Participaron miembros de las juventudes de Pilar, San Isidro, Confidentia, Córdoba, Mendoza y San Juan. Algunos de los participantes comparten su testimonio.
“Galilea para mí fue un tiempo de oración, servicio y formación. Fueron 11 días en los cuáles, la única preocupación que tenía era la duda de cómo en ese día podría ayudar a la gente del barrio de Florencio Varela. Ahí me encontré con una realidad muy diferente a la mía. Fue ver con mis propios ojos todos aquellos problemas que me contaban y que muchas personas los sufrían cotidianamente. Pero no fue sólo eso, lo que más me gustó de esta experiencia fue que no sólo vimos esta realidad, sino también nos involucramos en ella. Al ser varios días, uno se va encariñando de las personas de ahí y ellas de vos, empezas a sentir lo que ellos sienten, querés lo mejor para ellos. Galilea te da la oportunidad de que aunque sea por unos días, hagas tu aporte para ir cambiando esa realidad. Al principio me parecía un poco sin sentido el tener que mover tierra, ayudar en una huerta, limpiar un depósito. Con los días me fui dando cuenta que con esas tonteras, con esas cosas tan sencillas como hacer reír a los chicos o escuchar a las personas mayores, es cuando uno pone su “granito de arena”, el cuál a pesar de ser pequeño, deja huellas en los corazones de los demás. Personalmente, tiendo a analizar todo desde un punto de vista muy lógico y por eso tiendo a caer en el negativismo, en el decir: ¿Qué puedo hacer yo? Pero Galilea te hace darte cuenta que no sos sólo vos, es gracias a Jesús que uno con tan poco puede lograr cosas tan grandes.” Armando, Córdoba
“Galilea es una experiencia desafiante en la cual uno sale al encuentro de Dios, a través de ratos largos de oración y el encuentro con los demás y con la misma comunidad. Galilea ofrece varios espacios de reflexión y adoración las cuales guían y motivan a uno salir al encuentro. Galilea se vive tanto puertas adentro, desde la hora del té a compartir en el uno a uno, como puertas afuera, ya sea desde el trabajo con los chicos en casa del niño, en la parroquia o en salir a misionar y conocer la realidad del otro, la cual se me hace muy extraña. Si tengo que describir Galilea la describo en una pequeña oración escrita por un amigo “voy es nuestra forma de decir amor, juntos el lugar donde llegar a Dios”. Manuel, San Isidro