Carta de Alianza octubre 2022

Carta de Alianza octubre 2022

Querida familia de Schoenstatt Argentina:

¡Les deseo un feliz y bendecido día de Alianza y aniversario de fundación del Movimiento! Este es el día para unirnos como familia internacional y peregrinar “espiritualmente” al Santuario original.

“Desciende Madre, quédate con nosotros”

Como schoenstattianos argentinos este año celebramos los 70 años de la presencia de la Mater en nuestra patria. 70 años de haberse quedado con nosotros. No me deja de interpelar que la Mater, en los comienzos, haya elegido lugares más bien humildes y alejados, con poco glamour, como Florencio Varela y Paso Mayor. Parajes periféricos en aquella época, apartados del ruido, sencillos y pobres. No grandes urbes. Siguió así una ley clásica del judeocristianismo:

Dios elige lo pequeño

Abraham, un anciano de un matrimonio estéril, sin descendencia, es escogido por Dios para ser el padre de su pueblo. Se formó y se acercó a su gente para escuchar sus clamores ante la opresión egipcia. Los condujo en un camino de liberación, selló con ellos una Alianza y les prometió una tierra de la que mana leche y miel, una tierra santa. De ese pequeño y sufrido pueblo, eligió a una joven virgen de la periferia, Nazareth, un caserío en aquel tiempo, para que dé a luz al Salvador, quien nace en otra periferia: Belén de Judea.

Schoenstatt sigue esta misma ley. José Kentenich, un pobre niño sin padre y casi sin familia, es elegido por Dios para ser el padre de una gran familia. Siendo un joven y débil sacerdote, en un seminario menor en un barrio en las afueras de una ciudad no demasiado importante, Dios lo impulsa a gestar una nueva vida en torno a una pequeña capillita abandonada.

A Dios le gusta establecerse en lo pequeño y desde allí irradiarse. Le gustan los comienzos modestos. Pareciera una especie de prueba que deben pasar los escogidos y afectados: creer que Dios está queriendo valerse de lo que humanamente no vale tanto. Hoy es un día de gracias para pedirle a la Mater que descienda a lo más pequeño, oscuro y olvidado de nosotros mismos, los lugares que menos nos gustan del alma, y desde allí se despliegue como madre, señora y reina nuestra.

Y de lo pequeño se hace grande

María y Jesús vienen de la periferia, Galilea. Luego, en la vida pública, Jesús se acercó a las ciudades. Recorría pueblos y ciudades, dicen los evangelios. El recorrido de la vida de Jesús es, en síntesis, de Nazareth a Jerusalén, la capital. Y allí, en la ciudad, que le había hecho llorar al contemplarla, Jesús se entrega y culmina su obra salvadora.

Nuestros Santuarios de Schoenstatt están haciendo un recorrido similar: de los primeros Santuarios alejados, más rurales, hemos ido pasando a Santuarios ubicados en las ciudades. También muchas grandes ciudades se fueron acercando al Santuario (dado el crecimiento demográfico). Sea como fuere, hoy en día, la Mater tiene presencia céntrica en varias urbes importantes, tanto en Argentina como en el mundo.

Es hermoso ver el camino de visitación que María está realizando. No se queda en la periferia. De Nazareth, sin demora, va al encuentro de su prima, en Ain Karen, cerquita de Jerusalén. Pensando en el desarrollo de la historia de Schoenstatt, a los Santuarios les siguió la Campaña del Rosario que acercó a María a las familias. Y a los Santuarios retirados le siguieron los Santuarios ciudad. Dios y la Mater quieren ocupar el centro de nuestras vidas, “…con gusto me estableceré en medio de ustedes y distribuiré abundantes dones y gracias (PK, Acta de Fundación)”. No se conforman con tener un lugar periférico.

Ella atrae corazones

Entonces atraeré aquí los corazones jóvenes hacia mí, y los educaré como instrumentos aptos en mi mano” (PK, Acta de Fundación). Ella se acerca para atraer con más fuerza, para estar cerquita de sus hijos. Nuestros Santuarios y ermitas se tornan, cada vez más, en lugares abiertos de peregrinación. Se va haciendo realidad aquella tenue intuición profética del Padre: “…quisiera convertir este lugar en un lugar de peregrinación, en un lugar de gracia…Todos los que acudan acá para orar deben experimentar la gloria de María y confesar: ¡Qué bien estamos aquí!” (P.K., Acta de fundación).

Los lugares de peregrinación necesitan de corazones humanos que proyecten la acogida de Dios y su madre, necesitan una animación pastoral. Veo al Movimiento con una misión en ese sentido. Las mismas comunidades oficiales de Schoenstatt (Federaciones e Institutos) están llamados no sólo a servir a la liga (el Movimiento), sino, con la liga, ponerse al servicio de todo peregrino que se acerque al Santuario.

Toda una vida junto a nosotros

70 años es una vida. Una vida de María junto al pueblo argentino, que es un pueblo mariano de viaja data. Ese amor a María sigue hoy vigente: un millón y medio de peregrinos caminaron a principio de mes al Santuario de Luján. Alrededor de 680.000 personas hubo el mes pasado en Salta, peregrinando al Señor y Virgen del Milagro.

En nuestras filas, el fin de semana pasado, al Santuario de La Loma, Paraná, peregrinaron más de 40 mil fieles desde la ermita de la Mater de Hasenkamp. Es la peregrinación más grande a un santuario de Schoenstatt en nuestro país. Pero no se trata de ser exitistas o quedarnos en los números, simplemente el saber que Ella recibió a tantos hijos suyos, nos alegra también a nosotros. La alegría de la amada, alegra al amante.

Agradecimientos y despedida

Aprovecho para felicitar a todas las comunidades de Schoenstatt a lo ancho y largo del país, a sus dirigentes y asesores, que con trabajo y esfuerzo hacen posible las celebraciones de este nuevo aniversario de fundación y fiesta patronal de la Virgen de Schoenstatt. Dada la fuerza de lo digital de este tiempo, constato que esta fiesta nos está uniendo cada vez más, como una misma familia. Me alegra también el peregrinar que está haciendo la “Cruz de la nueva unidad” por los distintos Santuarios y comunidades. Su recorrido también nos va poniendo en comunión.

Cariños y bendiciones especiales a todas las mamás por el reciente día de la madre. Este último tiempo se ha revalorizado la maternidad. Se necesita valor y mucho amor para regalar y cuidar la vida. Ustedes, queridas mamás, lo tienen, y por eso, nuestro agradecimiento y admiración hacia ustedes. Nos acercan también el corazón y el cariño de la Mater.

Seguimos caminando juntos, en Alianza. Saludos y bendiciones,

P. Pablo Gerardo Pérez

Director Nacional

Movimiento Apostólico de Schoenstatt Argentina


Compartimos el link del video de Alianza de octubre 2022:  https://youtu.be/ccMsTEfJQ0s