Carta de alianza agosto 2023

Querida familia de Schoenstatt de Argentina:

¡Bendecido día de Alianza! Que el Señor y la Mater nos bendigan y bendigan a nuestra patria en este día regalándonos la certeza de que están caminando junto a nosotros. Estas semanas de agosto han sido muy densas vivencialmente.

JMJ: la iglesia está viva

La primera semana seguimos por los medios católicos la Jornada Mundial de la Juventud. Conmovió ver un millón y medio de jóvenes congregarse en torno al sucesor de Pedro, rezar y soñar juntos una iglesia nueva. Chicas de la JF, de varios lugares del país, fueron las representantes de nuestra juventud schoenstattiana. Nos alegramos profundamente por ellas y porque nos harán más cercano este paso de Dios por sus vidas.

Sigue siendo inspirador el Santo Padre en sus exhortaciones. Nos dice con claridad que cada cristiano es llamado por Dios simplemente por su amor de padre: “Todos fuimos llamados por nuestros nombres…Llamados porque somos amados…Llamados sin maquillaje…Me llama y ama como soy… Ninguno es cristiano por casualidad…Somos hijos valiosos…”.

También les decía a los jóvenes que esta JMJ “No son unas vacaciones, un viaje turístico, y tampoco un evento espiritual en sí mismo; la Jornada Mundial de la Juventud es un encuentro con Cristo vivo a través de la Iglesia…” (Asamblea general del 9 de agosto).

Francisco piensa la iglesia con categorías muy amplias. No como un lugar de privilegio sino como un espacio necesariamente abierto a todos. “En la iglesia nadie sobra…” Nos cuesta mucho esta categoría. No estamos acostumbrados. El sentido común nos dice otra cosa. Queremos que la gente sea digna de estar en la iglesia. Por eso nuestras conquistas espirituales con el capital de gracias nos parecen muy lógicas. Tienen algo de un esfuerzo que le damos a Dios a cambio de lo que él nos quiera dar. Pero, en realidad, no hay ningún trueque ni intercambio. Todo es gratuito y entregado por amor sin esperar nada a cambio. O eso debiera ser. Hacia eso queremos madurar en nuestro amor hecho acción.

El amor de Dios es tan grande que quiere regalárnoslo como si fuese nuestro merecimiento. Pero en el fondo es gratis e incondicional porque somos sus hijos. Solo el amor de una sana madre por sus hijos sigue una lógica similar. Las madres tienen el corazón elastizado, siempre hay espacio para uno más y nunca se cierra.

La Mater sigue pidiendo pista

Nuestra Señora Apurada le decía Francisco a la Mater en Lisboa. Así actuó Ella en estos últimos meses después de muchos años de conquista de la familia chaqueña. Luego de idas y vueltas, hasta transitando por momentos dolorosos, en el último tiempo la Mater se apresuró y el pasado 3 de agosto, la Presidencia tuvo la alegría de aprobar el proyecto de construcción del Santuario en Resistencia. En paralelo, la familia sanjuanina ya está por comenzar el techo de su Santuario. Nos unimos a ambas familias con nuestro capital de gracias y oraciones. No está de más recordar que siempre se puede aportar también desde lo material.

“…sobre todo, les pertenece mi corazón”

Como aliado a la Mater, fue muy fuerte lo vivido en Rosario en la ordenación episcopal de Mons. Ernesto Fernández, del Instituto de Sacerdotes Diocesanos de Schoenstatt. Como schoenstattiano nunca pensé que algún día se daría lo que se vivió en esta celebración. Fue un festival de la Alianza de amor. La mitra, con un enorme logo de Schoenstatt, la cruz de la unidad pectoral, el símbolo episcopal con el santuario, las canciones, en especial: “Madre hoy quiero hablarte…” compuesta por Fabián Eichenberger, también rosarino, del Instituto de Familias. Todo hizo que la celebración toque fibras muy profundas en los hijos de la Mater. Sumado a la presencia de Monseñor Jorge González, de la federación de presbíteros, obispo auxiliar de la Plata. Todo mostraba como aquella famosa frase del PK: “A la sombra del santuario, se co-decidirán los destinos de la iglesia…” se va haciendo más palpable.

En sus palabras de agradecimiento, Monseñor Fernández, picarescamente, hizo suyas las palabras de nuestro padre fundador de aquel 27 de octubre de 1912: “enteramente me pongo a disposición de ustedes con todo lo que soy y tengo, con mi saber y mi ignorancia, con mi poder y mi impotencia, pero sobre todo les pertenece mi corazón”. Era fuerte escuchar eso de un obispo sumado a todo un desarrollo de pensamientos kentenijianos. No estoy acostumbrado a eso. Intuyo que ninguno lo está. Estábamos acostumbrados al cuestionamiento. Claramente nos encontramos en un nuevo estadio. Gracias a Dios.

Como cierre de la velada, la familia rosarina preparó y ofreció una cena familiar muy acogedora y alegre, a tono con lo que vivíamos. ¡Felicitaciones y agradecimiento a nuestros hermanos rosarinos!

Que sea un PASO de Dios por nuestra patria

El país se sorprendió este domingo por el resultado de las elecciones. El ganador ha sabido tocar fibras del pueblo: la libertad y el descontento con la clase política. El pueblo está vivo. Y ha reaccionado. Es un tiempo para rezar mucho por nuestros candidatos y por nuestro pueblo argentino que este año probablemente tenga que votar un par de veces más para elegir autoridades.

Me ayuda pensar al voto como un capital de gracias cívico. Podemos caer en la tentación de subestimar nuestro voto. Mirándolo desde la fe, pensado el voto como nuestro capital de gracias, la cosa cambia. Es un esfuerzo más que entregamos en esta difícil tarea que tenemos los argentinos. Tenemos que rezar mucho, con fe y ganas en serio. No solamente por estas elecciones sino por la gestación de una nueva cultura en Argentina, más humana y por eso más de Dios.

Quedamos en eso, permanecemos fieles.

Saludos y bendiciones, 

Compartimos el link del video de Alianza de agosto 2023: https://youtu.be/wFBcGpVJ8hA