Jornada de Tesoreros 2018 – Nuevo Schoenstatt
Autor: P. Pablo Pérez
El fin de semana del sábado 25 y domingo 26 de agosto nos reunimos en Nuevo Schoenstatt para la jornada de Tesoreros, 15 miembros de distintas ramas del país junto al equipo organizador de la jornada autodenominado EDI MAS (Equipo de Desarrollo Institucional del Movimiento Apostólico de Schoenstatt).
En la jornada coincidimos en un diagnóstico general de cómo están encaradas las economías a nivel diocesano y en nuestras ramas del Movimiento:
- Constatamos una fuerte atomización de las economías de las Familias diocesanas y dentro de ellas a su vez, la atomización económica de las mismas ramas. Atomización que se da no por mala voluntad sino por la carencia de un sistema más adecuado y un responsable o equipo destinado a acompañar el buen funcionamiento de la economía.
- Básicamente el manejo que tienen los ecónomos es desde una perspectiva de corto plazo: 1 o 2 años de acuerdo a la duración de sus mandatos en la Familia o rama correspondiente.
- Constatamos además la situación con que los ecónomos en las distintas ramas llevan a cabo su labor, urgidos por “llegar a fin de mes” para afrontar los gastos necesarios para la subsistencia. No abordamos en concreto esta labor de los ecónomos ya que fue realizada en jornadas previas.
- En varios lugares tampoco se tematiza el aspecto económico, sino que se minimiza y termina recayendo el peso sobre unos pocos.
Reflexiones al respecto
Tomamos conciencia de que la problemática en la cual estamos insertos, es la problemática de la sociedad (por lo menos argentina) en general. Esta atomización que señalábamos y la ausencia de canales visibles minan la operatividad de una corriente solidaria dentro de la Familia o Movimiento.
En este sentido, nuestra pretensión va más allá de una respuesta concreta a la obtención de fondos. Tal como dice una conocida historia: “No levanto piedras, construyo una catedral”, nos encontramos dentro de la tarea de generar nuevos modelos económicos más católicos (y por qué no, schoenstattianos) de funcionamiento. Al estar lo económico plasmado dentro de una cultura, buscamos generar una nueva cultura. Lo cual es coincidente con el fin de Schoenstatt de educar “hombres nuevos en nuevas comunidades”.
Así es como llegamos a la toma de conciencia de que abordar el tema económico, no es solo algo funcional operativo (generar fondos y administrarlos), sino también un instrumento pedagógico muy valioso.
En busca de un caso preclaro
Buscando luces y vías de salida de esta problemática, vimos el caso de la génesis y desarrollo de un proyecto económico de la Juventud Femenina de Schoenstatt Argentina, llamado “JF Schoenstatt EDI”. Nos adentramos en la gestación del proyecto y sus bondades. Vemos aquí un buen modelo que podría llegar a replicarse en las distintas ramas locales y luego “anudado” a nivel nacional.
Aplicación concreta
En este sentido creemos que sería de mucha ayuda, a partir de los principios y herramientas estudiadas, que los asistentes a la jornada busquen disparar procesos de desarrollo en las diversas ramas locales o consejos diocesanos en diálogo con los asesores locales, coordinadores diocesanos y equipo de tesoreros.
No es el primer interés difundir esta propuesta en forma masiva sino en pequeños espacios. Traducir la espiritualidad de Schoenstatt a un modelo económico. Empezar un proceso orgánico implica un trabajo lento buscando voluntades en las diversas diócesis.